
La reforma afectará principalmente al interior del edificio de dos plantas, además de sótano, que ocupan actualmente los agentes locales, ubicado frente a la casa consistorial. Una de las actuaciones permitirá separar el calabozo de la zona de vestuarios con una pared y una puerta que comunique ambas dependencias.
Ya en la primera planta, los trabajadores ganarán un nuevo despacho al retirar el pequeño 'office' ubicado en este piso. En el piso superior también contarán con otro nuevo despacho, una vez se lleve a cabo la operación de redistribución de las salas actuales.
Esta rehabilitación forma parte de las mejoras que el Ayuntamiento de la localidad tiene previstas para renovar la comisaría y el cuerpo local de policía. En lo que respecta a la plantilla se ha aumentado hasta los 34 agentes. También se ha renovado el armamento con la adquisición de pistolas que han sustituido progresivamente a los antiguos revólveres, que llevaban veinte años en desuso.